CUIDADO CAPILAR EN OTOÑO: CLAVES PARA POTENCIAR ESTA CATEGORÍA EN LA FARMACIA

Llega el otoño, y con él, el cambio de estación, temperaturas más frescas, menos horas de luz… y también un momento en el que el cabello necesita más atención. Si en verano ha sufrido, en otoño muchas personas notan una caída más intensa y cambios en su aspecto. Aquí, desde la farmacia, tenemos un papel clave: acompañar a nuestros clientes en el cuidado capilar, educar desde la evidencia y ofrecer soluciones reales. Este artículo es una invitación a mirar el otoño como una oportunidad para reforzar esta categoría desde nuestro mostrador.

¿Qué le pasa realmente al cabello en otoño?

El otoño estresa al cabello de otra forma. Tras los meses de sol, cloro y sal, llega una época en la que se combina la caída estacional con los efectos acumulados del verano y los primeros cambios de temperatura y humedad. El resultado: un cabello más poroso, más seco, más apagado y, en muchos casos, con caída más evidente.

Los rayos UV del verano han alterado las proteínas estructurales del cabello, degradado su pigmento (ya sea natural o artificial) y favorecido la oxidación de los lípidos naturales que lo protegen. A esto se suma que la llegada del otoño suele coincidir con una fase telógena más marcada, lo que explica la percepción de “mayor caída” en muchos pacientes.

Y no sólo el cabello: el cuero cabelludo también sufre. Los cambios de temperatura, la humedad ambiental y el estrés postvacacional pueden alterar su microbioma, generando picores, sensibilidad o descamación.

Otoño: el momento ideal para activar esta categoría

En la farmacia sabemos que cada estación trae nuevas necesidades… y nuevas oportunidades. El otoño es un momento ideal para trabajar la categoría capilar porque el consumidor nota cambios visibles: caída más intensa, falta de brillo, rotura, encrespamiento, cuero cabelludo sensible. Busca soluciones y valora las recomendaciones personalizadas.

Además, los productos capilares suelen ser altamente visuales y sensoriales, lo que facilita su exposición atractiva en la farmacia y genera compras complementarias. Un ejemplo: quien viene buscando un tratamiento anticaída puede estar abierto a llevar también una mascarilla nutritiva o un sérum reparador si explicamos bien su función.

Recomendaciones clave desde la farmacia

Aquí van algunas pautas concretas que podemos compartir desde el mostrador:

• Limpieza inteligente: No se trata de lavar más, sino de lavar mejor. Podemos recomendar champús suaves, con tensioactivos respetuosos y activos calmantes si hay sensibilidad en el cuero cabelludo. Es muy importante retirar bien residuos y mantener un entorno capilar equilibrado. Los exfoliantes capilares una vez por semana también pueden ser aliados para mantener el cuero cabelludo sano y receptivo a tratamientos.
• Nutrición y reparación: Mascarillas ricas en aceites vegetales y proteínas, desenredantes sin aclarado para proteger el cabello frágil, aceites capilares que reparen la cutícula… Todo suma. La clave está en adaptar la textura al tipo de cabello y en enseñar a usarlos correctamente (de medios a puntas, tiempos de exposición, frecuencia).
• Tratamientos anticaída: En otoño es frecuente observar un aumento fisiológico de la caída capilar. Este es un momento idóneo para explicar cómo funcionan las lociones y ampollas específicas, insistiendo en la constancia de uso y en las expectativas reales de resultados. Recordemos que no se trata solo de detener la caída, sino de fortalecer la fibra y mejorar la calidad capilar global.
• Complementos alimenticios: Una estrategia 360º pasa también por el interior. En otoño, es interesante incorporar activos que fortalezcan el folículo y apoyen el crecimiento capilar: biotina, zinc, aminoácidos azufrados, inhibidores de la 5-alfa-reductasa como el Sabal Serrulata, etc. Explicar los tiempos de acción y gestionar expectativas es clave. En casos de caída intensa o prolongada, se debe valorar un estudio médico o dermatológico complementario.

Consejo y comunicación eficaz

Escuchar primero, preguntar después. Alguien que te dice “se me cae mucho el pelo” probablemente está pidiendo ayuda para fortalecerlo y recuperar su vitalidad.
Evitemos los tecnicismos vacíos. Hablemos de beneficios concretos: “Este tratamiento ayudará a frenar la caída y fortalecer desde la raíz”, “Esta mascarilla te devolverá suavidad y brillo”, “Este suplemento puede ayudarte a frenar la caída desde dentro”.

Proponer rutinas también funciona. Un champú + tratamiento anticaída + complemento alimenticio puede convertirse en el trío estrella del otoño. Incluso puedes preparar kits temáticos en la exposición de la farmacia.

Sumar valor desde el conocimiento

El cuidado capilar en otoño va más allá de la estética. Es salud, es bienestar y es una oportunidad para conectar desde el consejo experto.
Aprovechemos esta temporada para reforzar nuestra posición como referentes en dermocosmética capilar. Porque cuando educamos, inspiramos y acompañamos, también cuidamos mejor.

Cedirian S, Prudkin L, Piraccini BM, Santamaria J, Piquero-Casals J, Saceda-Corralo D. The exposome impact on hair health: etiology, pathogenesis and clinical features ‒ Part I. An Bras Dermatol. 2025 Jan-Feb;100(1):131-140.

Pilar Embid Aznar. Farmacéutica.

Fecha de elaboración del material: Noviembre 2025